--- Ana Teyssier ---
Me levanté muy de madrugada, inició mi jornada, sentí que solo cerré los ojos y los volví a abrir, aún me sentía fatigada, si así iban a ser mis días, no sé cuánto aguantaría. Llego al apartamento de mi jefe, aún estaban las luces apagadas, inmediatamente me quito los tenis y voy directo a la cocina, al llegar ahí, la veo.
Una hermosa rubia de piernas largas, muy largas, se veía preciosa, su melena largar hasta la cadera, rubia y con la piel increíblemente blanca, solo llevaba un camisón puesto, no dejaba nada a la imaginación, al entrar me ve con ojos de espanto y grita:
- ¿Quién demonios eres tú?
- Pe… Perdón, soy… - Digo, pero de algún modo se me atoran las palabras en la garganta.
- Te hice una pregunta… ¿Quién demonios eres? O me respondes o llamo en este instante a la policía, esta es la casa de Dominik Müller… - Me dice con un tono de voz alto.
Yo al escucharla, no puede evitar compararla con Casandra Riva, pero, aunque quisiera responderle como debía, solo