—He estado investigando el paradero del doctor Anjos estos últimos días y he averiguado dónde está ahora—dijo Mario de repente.
La noticia hizo que a Sofía se le iluminaran los ojos.
—¿De verdad lo han encontrado?—No se lo podía creer y miró a Mario con incredulidad.
—Sí, está en el extranjero y no piensa volver por aquí—dijo Mario. Al fin y al cabo, acababa de salir del país, así que era comprensible que no quisiera volver.
Sofía pensó lo mismo y dijo:
—¿Has contactado con él? ¿Está dispuesto a tratar a Diego?
El Dr. Anjos gozaba de renombre internacional y ya había sido rechazado anteriormente por Diego, por lo que era probable que esta vez los rechazara a ellos.
—El doctor Anjos está dispuesto a hacerlo, pero con la condición de que vayamos a su hospital en el extranjero para recibir tratamiento—dijo Mario.
Sofía pensó que tenía sentido y dijo:
—Entonces vamos. No podemos perder una oportunidad así.
—Sofía, ¿vienes conmigo?—preguntó Diego nervioso.
Tras un breve moment