15.

—Gracias, Franco —dice Augusto abrazándolo y dándole unas fuertes palmadas en la espalda.

—Sí, gracias, «grandulón» —añade Sandra acercándose por detrás y abrazándolo con el mismo cariño.

Para Nora era interesante ver la demostración de afecto entre los hermanos. Los tres eran delincuentes y pertenecían al mismo grupo de escoria que formaba el clan de La Cosa Nostra y, aun así, ante los ojos de la monja, parecían una familia unida y llena de cariño.

—Necesito que una de las propiedades que me toque… la pongas a nombre de Nora —dice Franco volteando hacia ella, viéndola pensativo.

—¡¿Qué?! —pregunta Nora poniéndose de pie con sorpresa.

—¿Tienes alguna en mente? —pregunta Augusto ignorando a la monja. 

—Una no muy cara

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo