PARTE SIETE: EL FUTURO QUE ES CRUEL
CAPÍTULO SEIS
En la mansión de los Muriel, Andrea que caminaba de un lado a otro, buscando por sus cosas.
— ¿Te verás con el chico otra vez? —Preguntó su abuelo ya casi listo para irse a la empresa.
—Sí, tengo que ir al doctor. Quiero nunca perder el control de mi embarazo.
—Así de preocupada estaba tu madre cuando te iba a traer al mundo. Nunca lo voy a olvidar. ¿Por fin sabremos si es una niña o un niño?
—No lo sé, no creo que quiera saberlo aún.
—Y, ¿qué hay del padre del bebé? ¿No crees que él tiene derecho a estar ahí? Hasta donde sé es una persona que se preocupa.
—Abuelo, te recuerdo que se firmó un contrato.
— ¿Y? No veo problema cuando es el corazón el que cambia.
—Por favor, abuelo.
—Por favor, tú Andrea. Aquel chico no merece que le des falsas ilusiones cuando ha estado para ti. Y ya que estamos hablando de esto, antes no había tenido oportunidad de decirlo pero…
—Abuelo, hablamos más tarde —dijo Andrea cansada.
— ¡Es momento de