***************LOREY****************
—Vaya —es lo único que articulo al sonreír—. Qué directo —comento; y él sonríe con aquella sonrisa tímida y seductora que poseía (parecía la sonrisa de un hombre tierno, pero.... muy travieso e aquel sentido que tanto me gustaba).
—Lamento si fui inoportuno con mis palabras.
—No, nada que ver; tranquilo —le pido al acariciar delicadamente su mano izquierda cuando, de pronto, el mozo que nos había estado atendiendo, se hace presente.
Aquel deja el vino sobre nuestra mesa y nos pregunta si ya deseábamos hacer nuestro pedio, ante lo cual decidí sincerarme con Leonardo y decirle que no conocía mucho de lo que había empezado a leer en la carta. Ante la situación, le pedí que él eligiera y así lo hizo.
—Gracias por eso —expreso sincera; y él sonríe.
—Espero que te guste lo que pedí por ti...
—Estoy segura de que sí —señalo firme y sonriente al tiempo en que tomo la copa de vino que el mozo había servido para mí.
—Cuéntame algo más de ti, Lorey —me pide L