Capítulo 93. Superando obstáculos.
Como la casa de los O’Hara se había quemado hasta las bases, ellos tuvieron que instalarse en una casa provisional en las afueras del pueblo, mientras reconstruían la suya.
Ryan y George discutían en la cocina con el ingeniero que Maddox había llevado de Augusta los planos de la nueva vivienda, así como de los edificios donde seguirían criando animales para sobrevivir.
Alana y Casey, con ayuda de Keenan, trataban de poner habitable la casa provisional. Movían muebles en la sala de estar cuando Maddox regresó.
—¿Quieren que envíe a alguien para que las ayude? —consultó al verlas mover un estante alto de una pared a otra.
—No estamos bien —respondió Alana, en el momento en que Keenan corrió hacia Maddox para darle un abrazo de bienvenida.
A todos los que llegaban a la casa él los saludaba de esa manera, no importaba si fuesen desconocidos o que ya habían ido en el día dos o tres veces. Estaba feliz de regresar a la isla, amaba aquel lugar.
La loba se acercó a él al terminar el traslado.