Sebastián
Me ha dejado, es lo primero que pienso. Lo reconozco.
Por supuesto que no creo que ella le hiciera daño a su hermana, ni que Marina la dejaría ir así como así, pero el miedo que me invade es tan irreal que soy capaz de pensar en cualquier cosa.
—¡Todos! ¡ ayuda! ¡ ahora mismo! ¡David