Cap. 42 Los buenos amigos
Estaba rodeada por grandes perros furiosos, tenía miedo y la voz áspera de la mujer se dejó escuchar:
—¿Quién m****a eres?
—Mi—mi nombre es Valka y estoy herida.
La mujer colocó una linterna delante de ella y vio a la mujer golpeada y sangrando.
—¡Santo Dios!
Apartó a los perros y la llevó a la casa en donde curó sus heridas:
—¿Tu marido te golpea?
—No…
—Puedes decirlo no más, yo pasé por lo mismo.
Entonces Valka mintió:
—Hui de él… Tengo miedo.
—Bien, te ves fatal.
Comer algo le hizo bien y entonces vio el teléfono:
—Señora Sara, ¿puedo hacer una llamada?
—Con tal de que no lo llames a él.
—No, nunca.
Marcó a Khan y estaba ocupado, luego a Fey y lo mismo, entonces marcó a Fedora… Esperó un instante y…
—¿Diga?
—¿Fedora?
Silencio y luego:
—¿Valka?
—Fedora, necesito ayuda…
Esperó largo tiempo y cuando vio el auto de Fedora y vio bajar a su amigo se emocionó.
—¡Valka!
—¡Fedora!
Corrió abrazarlo con fuerza.
—Chica, te ves fatal.
—Fedora, fue horrible.
La señora