Narrador

tres meses después:

Marcela tenía contracciones, sus cachorros estaban a punto de nacer; tenía mucho miedo, ya que no iba a dar a luz uno solo, sino cuatro. Sabía que los partos gemelares en humanas eran peligrosos por el esfuerzo de la madre y los bebés en ese momento, por eso muchas veces se optaba por la cesárea para preservar las vidas de todos. En su caso era peor el panorama, ya que al ser tantos el cansancio y sobre esfuerzo podría costarles la vida; esto hizo que tomara una decisión arriesgada, parir como lo hacen las lobas, ya que de esa manera sobrevivirían ella y sus crías.

Salió de su casa rumbo al bosque, iría a la cueva detrás de la cascada donde se entregó por primera vez a su amor, ese que le ha