Capítulo 185
Helena
Santiago y yo, después de pasar por varios trámites, al fin tuvimos la respuesta buscada y nos entregaron, después de una espera que pareció eterna, al nuevo integrante de nuestra familia. Fuimos los tres a recogerlo al lugar de adopciones, Julieta, Santiago y yo, y al recibir a mi segundo hijo en mis brazos sentí una felicidad muy parecida a aquella vez cuando tuve a Julieta entre mis brazos.
–Hola, pequeño soy tu mamá y él es tu papá y ella es tu hermana mayor, Julieta. Estás muy hermoso.
Fueron mis primeras palabras de amor a mi segundo hijo, era un bebé de pocos meses de nacido y perfectamente sano. Me sentía una madre primeriza de nuevo, después de muchos años desde que cuidé a Julieta de esa edad.
–Hola, pequeño, soy tu papá. Bienvenido a la familia Treviño Altamirano.
–Hermanito hermoso, eres todo un encanto.
Julieta no podía contener la emoción y después que Santiago también cargara en sus brazos a nuestro segundo bebé, se lo puso en sus brazos a Julieta y