CURVAS DE INFARTO. CAPÍTULO 29. Un hombre muy territorial
Chloe la miró de reojo. No iba a responder, pero tampoco hizo falta porque la licenciada Hawkins alzó la mirada en ese momento como un radar detectando molestias.
—Sandra —le dijo a la pasante con tono mitad severo y mitas sarcástico—, Chloe