Capítulo 38

Capítulo 38

Gunadi caminaba inquieto. Su rostro estaba rojo y la mandíbula apretada. No se esperaba lo que dijo su propio hijo. Este mundo es muy estrecho.

"¿Qué vamos a hacer ahora, señor?" Su esposa, Dena, tocó el hombro de su esposo, esperando que el hombre tomara una acción rápida. No quería enredarme con un problema persistente. Además, Teguh debe haber sabido sobre la condición de Melati y le había hecho algo malo. Entonces, la mujer que estaba embarazada de cinco meses estaba acostada en una cama de hospital.

Gunadi se giró para mirarlo fijamente. Su mano se extendía perfectamente frente a la cara de su esposa con quien había estado casado durante cinco años.

"¿Te das cuenta de que aparte de la culpa de ese bastardo, todo esto es culpa tuya? Si no te hubieras enamorado de los avances de ese hombre, no habría tenido que renunciar a mi propia hija para que se aprovechara de él. Y ahora ves, un problema que causaste creó otro. Parece que no tiene fin". Gunadi dijo inquieto. No sé
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