118. Cállate
Demetrio
Sabía que la oscuridad me estaba invadiendo cada pensamiento que tenía. Sabía lo que significaba, estaba perdiendo mi cordura y en el fondo sabía que me lo merecía. Solo ver a Mario y su dolor por la ausencia de su compañera, esa oscuridad me abatía.
-¿te puedo acompañar?-preguntaba Jess, nunca me había gustado esta hembra, a pesar de lo que Adamo decía, si hubiera sido por mí, hubiera preferido mil veces a Kyle que a Jess, pero Adamo era Adamo.
-no, prefiero la soledad-dije sentado en mi cama, me dolía el cuerpo, sabía que mis heridas no estaban sanado bien.
-¿por qué me odias? ¿por la cachorra?-dijo Jess sonriendo.
-piérdete Jess-dije y cerré mis ojos, sabía que el guardia nos miraba y estaba seguro si esta tonta pensaba atacarme, la mataría en el acto.
-¿por qué no acompañaste a Adamo y Mario?, ustedes siempre están juntos-decía y ya sabía que estaba haciendo, la muy manipuladora trataba de ponernos en contra-curioso Mario salva a su compañera y a ti casi te matan por ir a