103. Limones
Adamo
Mario y Demetrio están actuando extraño, pero no tengo tiempo de pensar mucho en eso, ya que el regreso de la bruja, nos trajo a un grupo de machos rouges que al parecer, sus crímenes eran tan graves que no se atrevieron a pedir a ninguna de las manadas benévolas que sean aceptados.
-no importa su pasado, solo que nos serán leales-me dijo la bruja en cuanto le mencione que esos machos me daban mala espina.
-solo no deseo más sorpresas-dije sabiendo que no había manera de echarlos, muchos de mis guerreros prefirieron mantenerse alejados de ellos.
-pronto tendré listas las dependencias para los alojamientos y nuestra casa-decía la bruja y quede sin respirar por un segundo-aun no me dejas preñada y es importante que eso suceda Adamo o me verás obligada a buscar otro donante.
Luego de esas horribles palabras ella se marcho, dejándome aún más inquieto. Entonces note como Mario me hacía unas extrañas señales para que vaya donde él se encontraba. Camine sin pensar en nada de lo que me