Cierra sus ojos concentrándose, entierra el bastón en la tierra. Siente cómo absorbe la energía necesaria que viaja hasta sus cuernos. Abre sus ojos y a través del Alfa Amat, se conecta con todos los integrantes de su manada, extendiendo el enlace a cada uno de ellos.

Pronuncia las palabras sagradas. Convoca a todos los dioses y ancestros. Vuelve a escuchar el crujido de la tierra, los rayos y relámpagos. Termina el conjuro agregando otro, para solo transportar a las personas y hacer desaparecer el pueblo de la manada Luna Nueva, evitando así que sea saqueado.

Nuevamente los colores los envuelven, hasta llegar a la claridad. Están en la plaza de su pueblo. Al volver en sí, mira a todos los miembros de la manada, arrodillados ante él en completa sumisión.

—Horacio, llévalos a la clínica, para que sean liberados del hechizo. Después, acomódalos a todos —o