Siempre fuiste tú.
Capítulo 13.
Luego de dejar a Elisa en su casa, Luke fue de inmediato a buscar a su prometida, necesitaba hablar con ella acerca de la determinación que había tomado.
No quería seguir ilusionándola y era mejor romper el compromiso, sabía que no le sería nada fácil, pues Diana siempre fue una mujer acostumbrada a hacer su voluntad, no obstante, su amor por Elisa estaba primero y no pensaba permitir que nada ni nadie le arrebatara la posibilidad de ser feliz junto a la mujer a la que siempre ha amado.
Una vez sonar el timbre, el ama de llaves le abrió la puerta y lo condujo a la sala donde ya lo esperaba Diana, perfectamente peinada y maquillada para recibirlo, lucía un vestido de diseñador que resaltaba su espectacular figura, lo saludó con un beso y un abrazó efusivo al cual Luke correspondió sin mucho afán.
-Me encanta que hayas venido a verme cariño-dijo Diana con su acostumbrada zalamería.
-Necesitamos hablar –contestó él.
- Espero que sea para hablar sobre la fe