Logan y Carolina acababan de regresar a la villa cuando sonó el celular de Logan.
Logan tomó el teléfono.
Unos instantes después, guardó el móvil, se volvió a poner la chaqueta que acababa de quitarse y le dijo a Carolina, que subió con él: —Tu bisábula se ha caído accidentalmente y se ha hecho daño, ahora está en el hospital, iré para allá, tú descansa pronto.
Carolina estaba preocupada: —Yo también quiero ir a ver a la bisabula...
—Mañana tienes escuela, así que puedes ir mañana después de clases.
—De acuerdo...
Logan se dio la vuelta y salió por la puerta.
En ese momento, sonó el celular de Carolina.
Ella lo miró enseguida.
Después de ver que era un mensaje de spam, sonrió decepcionada.
En el camino de vuelta, había llamado a su madre para saber si la persona que acababa de ver en el centro comercial era ella.
Pero su madre no contestó.
Ahora que había un mensaje en su teléfono, pensó que era un mensaje de su madre.
Qué decepción...
Pero luego, pensó que si su madre estaba realmente