Freya

Después de la interesante conversación que tuve con Claire hace unos minutos, volví a casa porque estaba furiosa porque Morgana se comportaba con tanta dulzura y alegría delante de todos, como si no me hubiera amenazado un par de veces antes. Me detuve frente al estudio de Jet, sabiendo que él estaría allí.

Seguí tocando y, al no obtener respuesta, abrí la puerta y la encontré vacía. El monitor de la esquina de su escritorio parecía estar encendido, incluyendo su portátil. Con curiosidad, me acerqué a echar un vistazo.

Ya que tiene la costumbre de no decirme nada, ¿y si lo averiguo yo sola? Apenas me había acomodado en la silla cuando la puerta se abrió y Jet estaba de pie junto a la entrada observándome con atención. No sabía si estaba molesto conmigo o no.

Tosí al darme cuenta de que me había pillado la mano en el bote de galletas. Me levanté lentamente de la silla y dije alegremente: «Justo la persona que esperaba ver». Arqueó una ceja en señal de interrogación, probablemente