Raquel limpió sus lágrimas después de haber llorado por un largo tiempo, su nariz roja evidenciaba el llanto previo.
Al dirigirse de nuevo a su oficina, tomó su celular y realizó una búsqueda rápida encontrando el número que necesitaba en ese momento.
Sara entraba sonriendo con Pilar y Verónica, detrás de ellas caminaba Jaime utilizando su teléfono. Sara se percató de como Raquel guardaba su teléfono en su bolso negro.
—¿A dónde vas?
Preguntó Sara al acercarse a Raquel.
—Tengo algo que hacer.
Soltó Raquel evadiendo la mirada de Sara, y así evitar que se percatara del previo llanto.
—Regresaré en dos horas, cuando lo haga nos pondremos a trabajar.
Soltó apresuradamente dirigiéndose a Jaime que se comenzaba a organizar sus papeles.
—¡Oh!, está bien.
—Bueno, los veo más tarde.
Exclamó Raquel al tomar su bolso rápidamente y alejarse, Sara no entendía mucho el comportamiento de Raquel, pero antes de que comenzará a cuestionarse sintió el dulce beso sobre su mejilla derecha.
—Nos vemos más