Mucho más tarde, mientras estaba tumbada en medio de una pacífica saciedad, Allegra frotó la mejilla amorosamente contra el pecho de él y pensó en lo feliz que era cuando estaban juntos. Mientras tanto Dante le acariciaba el cabello.
— Prepararé algo de comer, me sorprendió encontrar tanta comida en la casa exclamó Allegra.
— Quiero que te alimentes y tu no gastas dinero así que le pedí a mi ama de llaves, la señora Grenwhit que se ocupará ya que te niegas a tener empleados.
— Yo puedo limpiar y prometo que comerás decentemente exclamó ella.
— Eres muy extraña, Allegra lo beso y salió de la cama.
Dante salio de la cama y se dirigió a la ducha al pasar por el vestidor se dio cuenta de que Allegra solo tenía la ropa que el había comprado y la ropa vieja de ella, suspiro.
Allegra estaba muy concentrada en la cocina cuando Dante ingreso. Budy le gruñó en cuanto lo vio pasar.
— Budy no exclamó Allegra.
Dante sonrió.— Parece que no termino de agradarle.
— Apenas te ha visto, ya se acostumb