**PV de Cat
"¡Dios mío!", un grito femenino y agudo siguió a los estruendos.
"Estás aquí. Estás aquí de verdad". Reconocí la voz de Fiona.
"¡No puedo creer que te vayas a casar!"
Las voces de otras mujeres resonaron desde el vestíbulo hasta la playa.
Me estremecí cuando oí a las amigas de Fiona h