*Sebastián*
Fui hasta mi habitación y me puse lo primero que encontré, salí en busca de Rei y la encontré en las escaleras.—Te lo dije, están más dulces sus esencias—dijo Gregory olfateando el aire a su alrededor.Corrimos por la casa, al parecer ella se sentía mejor porque no daba señales de sentirse mal y en ningún momento perdió el ritmo.—Menos mal que fue una falsa alarma—dijo Gregory muy tranquilo.—Ahora estás tranquilo, pero bien que antes casi te pones a llorar—bromeé a lo que él se quedó en silencio.—Ya volvamos, tengo hambre—dijo Rei después de un rato.—De acuerdo—respondí para después tomarla por la cintura y darle un profundo beso, la tome en brazos y la bese todo el camino hasta la habitación, nos metí en la ducha, así como estábamos.—Haré que tengas más hambre—dije arrancándole la ropa.Cuando terminamos de bañarnos, salimos de la ducha y ella empezó a frotarse las cremas, c