Gary salió de la cocina caminando con paso apresurado, iba a salir detrás de él, pero mis piernas no respondian, las lágrimas salían con prisa y mi corazón estaba lastimado, me deje caer en el frío piso llorando, quizá me veía ridícula, pero había sufrido muchas humillaciones recientemente.
Y sinceramente tenía el alma dolida, tanto que temía morir ahí por el dolor emocional que esto me causaba.Pase horas sentada en el piso, hasta que sentí la necesidad de regresar a casa, eran las 5 am de la mañana, Agradeci a todos los dioses que no me topará con ninguno de los chicos, no quería tirarme a llorar como una nena de 5 años.***Habían pasado un par de semanas sin saber nada de mis “amigos”, una semana entera estuve en cama llorando lo miserable y lo patética que me sentía, recordando