Skylar se presentó al trabajo después del almuerzo. La mañana se la había pasado entre exámenes y estaba agotada. Habría preferido estar en otro lugar que no fuera ese, pero tenía que terminar las cosas como era debido. No era ninguna cobarde que iba a desaparecer de la noche a la mañana.
—¿El señor Harris está en su oficina? —le preguntó a Emma después de saludarla.
—No, todavía no ha regresado.
—Gracias.
Se dirigió hacia la sala de copias y consiguió una caja, con ella en manos fue a su escritorio y empezó a empacar sus pertenencias. Una vez que terminó lo acomodó debajo su escritorio y se sentó a trabajar como si fuera cualquier otro día.
Estaba revisando unos documentos que Dan le había enviado al correo cuando escuchó unos pasos acercarse. Sabía de antema