Capitulo 3

James contempló a la mujer en el escenario por un largo tiempo. No fue hasta que ella terminó su canción y todos estallaron en aplausos que él reaccionó.

Parecía ser otra persona, no se parecía en nada a la Astrid que él recordaba. La chiquilla molesta que lo perseguía y era capaz de acciones bajas para conseguirlo.

Pero la sospecha se quedó clavada en su mente.

Astrid Anderson no ha tenido noticias de ella desde que dejo a la familia King hace dos años. Es como si la tierra se la hubiera tragado.

Tal vez estaba equivocado.

No podían ser la misma persona en absoluto.

Además, la mujer en el escenario es físicamente distinta a la mujer que recordaba. Astrid tenía el cabello tan rubio como el oro, su cuerpo era delgado y de aspecto frágil. En cambio, esta mujer es totalmente distinta, el vestido que usaba resaltaba cada una de las curvas de su cuerpo, su aspecto es sensual y elegante. Y su cabello, es de un inusual color azul.

James pensó para sí mismo y miro a Robert a su lado. Quien aún estaba hipnotizado por la mujer de hace un momento.

—jefe, ¿quiere firmarla?

— ¿A quién?

— ¡Selene! ¿No la viste en el aeropuerto? Es tan popular como hermosa, y tiene una voz mágica. Muchos querrán tenerla en su personal de artistas, sería una gran inversión para el Grupo King. ¡Sería una lástima no firmarla!

¿Selene?

El nombre es tan familiar.

¿Cómo te llamas? – pregunto el chico de aspecto severo – Hola, mi nombre es Astrid… ¡Astrid Selene Anderson!

La pequeña niña le sonrió dulcemente tendiendo su mano para regalarle un trozo de pastel – La abuela dice que seremos como hermanos. ¡Estoy feliz de tener un hermano!

James se perdió en los recuerdos por un instante. No pudo evitar levantar la cabeza y volver a mirar a la mujer que daba las gracias a todos. Las palabras de Robert volvieron ¿Dos años después de su debut?

El estilo de su voz es comercial, su presencia se destaca en el escenario. Es físicamente hermosa y tiene popularidad.

Frunció el ceño ante sus conclusiones, todo esto era completamente diferente a la Astrid que él conocía.

Pronto, descubrió que algo andaba mal, el rostro de Selene se puso pálido, era como si estuviera ocultando algo, pero a pesar de su expresión sonriente, él pudo descubrir que algo sucedía. No sabe por qué, quizás sea solo una intuición.

Selene sonrió al público coqueta, le gustaba sentirse admirada. Todo sería perfecto si los zapatos no estuvieran matándola.

¿Cuántas veces debo decirle a Andrés que verifique mi talla?

Seguía sonriendo al público, cuando vio un rostro conocido mirándola.

¡James!

Mirándose el uno al otro, el aire de repente se volvió tenso. La tez pálida de hace un momento se volvió rojiza, ella miró al hombre sin parpadear, y su cuerpo parecía haberse congelado.

En un momento volvió a sus sentidos, odiándose a sí misma por ponerse nerviosa después de haber pasado tanto tiempo.

No seas estúpida, ya no puede hacerte daño. ¡Ahora eres otra mujer!

Pero no se puede controlar las emociones, así pasen mil años este hombre seguiría afectándola. Y más, cuando la mira de esa manera. Pensó, que después de verlo en el aeropuerto estaría preparada para una segunda vez.

Qué equivocada estaba.

Selena volvió a sonreír, dando una respiración profunda e incluso olvido el dolor en sus pies.

¡Ella no caería ante él!

Se mostraría, elegante, segura, como una diosa.

Pero después de bajarse del escenario, prácticamente corrió al camerino y Andrés la siguió con sospecha.

— ¡Cierra la puerta! – ordeno.

El chico cerro las puertas de inmediato y, cuando miro hacia atrás, vio a Selene quitándose los zapatos con una expresión dolorosa.

Ella apretó los labios.

— ¿Andrés? ¿Estás insatisfecho con tu salario? – le pregunto al chico que la miraba confundido.

—No, me pagas muy bien. ¿Por qué la pregunta?

—Entonces, ¿por qué rayos no verificas mis tallas? ¿Quieres que haga el ridículo en el escenario? ¡Maldita sea, haz bien tu trabajo!

Andrés miró a Selene apenado, solo para darse cuenta de lo fuerte y valiente que era. Ella siguió con el espectáculo a pesar de su error, definitivamente era muy profesional.

— ¡Lo siento! ¡No volverá a suceder, lo prometo!

Selene agitó su mano. —Solo intenta recordarlo la próxima vez, apura y tráeme una curita. Habrá una cena más tarde…

— ¿Cómo puedes salir en ese estado? Llamaré a Susi de inmediato.

Andrés estaba a punto de sacar su teléfono, pero Selene lo detuvo.

—Escucha mis órdenes. Voy a ir. No pasa nada.

Al final, Andrés solo pudo seguir sus órdenes y la ayudo a curar su herida y elegir un tipo de calzado adecuado. Aunque eso signifique cambiar su estilo elegido para esta noche.

— ¿No te duele? ¿Por qué insistes en ir? Bien puedes darte el lujo de rechazar esa invitación.

Selene le sonrió con suficiencia. — ¿Qué es esto? Es solo una pequeña herida, no es nada de gravedad. He experimentado mucho más dolor antes, ¿Por qué me detendría ante esto?

— ¿Qué dolor? – pregunto Andrés sospechoso.

El rostro de Selene se contrajo. Sus ojos se oscurecieron ante el recuerdo, parecía no querer volver ahí.

—Nada importante… Quiero decir durante el tiempo que fui aprendiz, tuve muchas horas sin dormir y practicaba hasta que mis pies casi sangraron. Tuve molestias en la garganta, dolores de espalda y mandíbula. Todo eso para poder participar en el espectáculo que me llevo hasta donde estoy ahora. Este dolor no significa nada.

Andrés escuchó con atención y no pudo evitar sentirse triste, definitivamente él no podría soportar todo eso. No es extraño que Selene sea tan famosa ahora.

—Estoy acostumbrada al dolor. Además, ¿Por qué seguimos hablando? Date prisa y prepara mi ropa. Usaré las botas mosqueteras Saint Laurent, junto con el vestido negro y usaré una gabardina. Me arreglaré el cabello yo misma. Te pido por favor que no preocupes a Susi. Los próximos eventos definirán mi regreso a Londres, así que no puedo equivocarme. — insto Selene.

—Está bien. Tienes razón. Iré a preparar la ropa.

—Bien.

En ese momento, un par de ojos grises como el acero se abrieron con sorpresa a través de la puerta. Mirando fijamente a las dos personas en la habitación, escuchando la conversación entre los dos.

¡Su voz era igual a la de Astrid!

La recordaba, había escuchado esa voz durante mucho tiempo. De hecho, cuando sus miradas coincidieron hace un momento, supo que debía ser ella, eran muchas las similitudes. Ella regresó y cambio su identidad.

¿Cuál era su propósito de aparecer frente a él con tanta fanfarria?

De repente, James se escondió detrás de una puerta, Andrés salió solo de la habitación. Él salió de su escondite, miro a su alrededor y abrió la puerta frente a él.

— ¿Trajiste los zapatos tan rápido? – En el momento en que levanto la vista, Selene se quedó de piedra.

El hombre frente a ella, atractivo y frío a la vez, camino hacia ella. Su cuerpo no se movió en absoluto, manteniendo la pose en la que estaba a punto de colocarse la curita.

— ¿No saludas a los viejos conocidos? ¿Eh, Astrid?

James camino paso a paso, sus ojos fijos en ella, detallando minuciosamente toda su persona.

Selena recuperó rápidamente su compostura y giro la cabeza mostrando una expresión confundida. — Lo siento, no sé de qué habla. No soy ninguna Astrid. Es posible, que esté en la habitación equivocada, señor.

James se rio burlón y miro a la mujer – Astrid, ¿estás fingiendo no conocerme?

—Mentiría si digo que no sé quién es. Eres el presidente de ‘EMPIRE ENTERPRISE’ ¿Quién no lo reconocería? – después de hablar, Selene se levantó y sé cerro la bata que estaba un poco abierta y mostraba algo de su ropa interior. Su acción no pasó desapercibida para James.

—Si no hay nada más, le agradecería que saliera. Quiero vestirme.

— ¿Cuándo te volviste tan indiferente? ¿De verdad? La Astrid que solía perseguirme y aferrarse a mí. La que solía saltar sobre mí cuando me veía e insistía en meterse en mi cama. ¡Astrid King!

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo