Parte 4...
Si estaban comprometidos, ¿por qué no había más alegría, más emoción en su voz? ¿O era realmente así y sólo ella la que no lo recordaba? Si fuera al revés, se sentiría muy aliviada y feliz de verlo.
Se rascó la cabeza, desconcertada, pero ahora no tenía nada que le hiciera recordar cómo era él, cómo eran juntos. Ella estaba a punto de hacer más preguntas para salir de dudas, cuando él se inclinó y depositó un ligero beso en su boca.
Se sintió bien, sintió que se calentaba. Le colocó el pelo detrás de la oreja y le pasó la mano por el cuello. Sus rostros estaban muy juntos. Cora seguía mirando su boca.
- Puedes hacer todas las preguntas que quieras más tarde -le besó la frente-. Ahora tienes que descansar, en cuerpo y mente. Hablaré con el médico y lo arreglaré todo. En un rato puedo llevarte a casa, ¿vale? - asintió.
La enfermera llamó a la puerta y entró trayendo una bandeja con un vaso pequeño con pastillas de colores y otro más grande con agua. Sonrió al ver que estaba s