Por Leonardo
-El tipo le propuso matrimonio y ella aceptó.
Vi la mirada de incredulidad.
Le conté como fué.
-Qué hijo de puta.
-Sí, el tema es que yo no sabía que ella le devolvió el anillo a los pocos días y me la pasé cada noche borracho, llevando a mi habitación cada día a alguna mujer que me cruzaba…
Noto que cambia la expresión.
-No te voy a mentir que antes que aparezca ese imbécil habíamos tenido un acercamiento que no llegó al final...yo a esa altura ya sabía que habían estado en varias playas nudistas.
-¿Varias?
Asiento con la cabeza.
Respiré hondo.
-Un día, me acerqué al solarium y ella se me acercó porque estaba con unos amigos, que habían conocido con Angy, yo no estaba muy presentable, era de mañana y ya estaba con unos whiskys encima.
-Te pegó fuerte…
-No tenés idea...subimos a la habitación y yo pensé que no era virgen…
-¿Era virgen?
Me preguntó asombrado.
-Sí…y aunque fue consentido…no tuve cuidado…
-¿Qué querés decir?
-Qué…la enterré sin cuidado y la desgarré.
-¿La la