Ellos no se tambalean, ni siquiera se nota el más mínimo interés por analizar mi propuesta y por eso, con mi mano sana señalo el teléfono.
— Si no van a tomar en cuenta lo que acabo de decir porque su alfa le ha ordenado algo completamente diferente, entonces, llámenlo y déjenme hablar con él.— Las cosas no funcionan así. — dice uno de ellos como si estuviera pidiendo la cura del cáncer.— No sé cómo funcionan, pero, si no me dejan comunicarme con mi esposo, ¿Cómo podré llegar a una solución? — pregunto enojada.— Lo mejor es que descanse, cuando vuelva a abrir los ojos estará en un lugar agradable y cómodo, mucho más que esta habitación.No quiero mostrarme débil ante el enemigo, porque es evidente que por mucho que quiera coexistir con los hombres lobos ellos tienen una forma