—Les presento a nuestra nueva directora de operaciones de Halloway Empire, mi esposa, Evelyn Grace Halloway.
Un aplauso llenó la sala de juntas cuando Marcus me presentó a todos los miembros del consejo directivo. Por suerte no llegamos tarde; no quería hacerlos esperar ni darles una mala impresión desde el principio. A lo lejos vi a Lauren, también aplaudiendo y sonriendo. Pero a pesar de esa sonrisa, seguía imponiendo; parecía que detrás había otro significado, como si yo hubiera hecho algo mal.
Como era mi primer día en la empresa de Marcus, cuidaba cada movimiento.
—¡Señora, la empresa de su esposo es enorme! No puedo creer que esté trabajando aquí, y que además me haya traído con usted —comentó alegremente mi secretaria Hazel. Ahora estábamos en mi nueva oficina, mucho más grande que la que tenía en Wilson Company.
Respiré hondo y miré a mi alrededor. Tenía que adaptarme otra vez: empresa nueva, entorno nuevo. Debía mantener la discreción y no podía darme el lujo de cometer error