Bueno damas y caballeros, no se cuanto falta para que nuestro bello príncipe y Tarah le cuenten la verdad al Rey, pero bueno mientras tanto y esperamos díganme ustedes.
¿Que hará el rey con esos dos pecadores?
Mi teléfono comenzó a sonar, no sabía quién me estaba llamando pero cuando mire el identificador de llamada y me sorprendí cuando vi quién era.
¡Dios!, Me había olvidado de mis amigas por completo.
Estaba un poco nerviosa y no sabía si contestar o no, pero si no quería quedar mal, lo mejor era responder así me gritaran fuertemente por no decir nada o puede y no sepan que estoy en Bogotá.
—Hola, Tania—Susurre mientras buscaba una