-Es una buena razón. - Miró de reojo al maletero: - ¿Tienes una almohada ahí dentro?
-Por ser tú, dejaré que lleves esa aberración de pizza a mi lado - hizo una mueca de asco hacia la caja donde James tenía su pizza con piña, la que había pedido solo por fastidiarla. - ¿Algún lugar donde tengas predilección para comer pizza o busco yo?
-Playa - respondió inmediatamente.
-¿No decías que no te gustaba la playa?
-No, dije que no sabía nadar - le corrigió esperando que tuviese sentido, luego de contestarle sin pensar - pero me encanta la playa.
Cristel se quedó mirándole unos segundos, sin que pudiese identificar si por su mente pasaba la sospecha de que estaba loco o aún peor, alguna similitud con Jake Hernández.
-A la playa será - decretó al final.
Había cenado tres veces contadas en la playa, él solo, nunca se lo había sugerido a sus dos mejores amigos, en su imaginación siempre terminaba la comida incendiada por Ryan o llena de arena por los fatídicos inten