23. PUDIERON HABERLO SECUESTRADO.
El guardia de la entrada toma a Dalila del brazo y la avienta por la puerta justo cuando Mustafá va entrando, la sostiene para evitar que caiga al piso, se da cuenta que también está Ibrahim, que está acompañando a la madre de su hijo, esto hace que Mustafá se moleste mucho.
— ¿Qué estás haciendo aquí? — le pregunta a su hermano con mucha indiferencia.
Ibrahim lo ignora y Dalila empieza a preguntar por su hijo.
— ¿Dónde está Ahmed?, ¡dime dónde está!, ¿cómo es que no lo encuentran? — le pregunta Dalila a Mustafá, está muy desesperada por la desaparición de su pequeño.
— Te dije que esta mujer no iba a entrar a esta casa, sácala de aquí — le ordena la mamá de Mustafá.
— Ella es quién más conoce a Ahmed, es quien nos puede ayudar a encontrarlo — le dice Mustafá a su madre.
— ¿Estás segura que no fue ella quién lo escondió?, solamente está haciendo esto para sacarte dinero — le dice la mamá a Mustafá.
— Puedo probar que Dalila no tiene nada que ver con la desaparición de Ahmed, ya que el