Tres semanas desde la desaparición de Kate y no había alguna sobre su paradero, policías, fuerza armada, detectives, prensa, todos buscaban alguna pista sin resultados concretos, las personas por la recompensa inventaban pistas y eso además hacía perder tiempo.
Antonio desesperado, más consciente porque en la selva por lo menos se mantenía alejado del trago, decidió volver al sentirse inútil por no buscarla.
-amigos les doy las gracias, siempre la selva me sana, pero en estos momentos necesito estar allá, estar pendiente y buscarla, para sentirme útil, si no la encontramos o tenemos noticias de que ella se fue por su cuenta, volveré a vivir aquí con Benjamín… aquí es donde me siento feliz con las personas que quiero…- dijo Antonio apenado
-Antonio yo te acompañaré- dijo Ultha su gran amigo
Los dos amigos volaron a la ciudad con Benjamín. La más contenta era la profesora que los estaba esperando en el aeropuerto, y de allí no se despegó de ellos, si no fuera por Ultha que se quedó en e