Jennifer Stone
Hoy está de cumpleaños Samir, por lo que invito a todos nuestros amigos más cercanos a darle una sorpresa en casa.
Su padre y yo nos ponemos de acuerdo para fingir que olvidamos su cumpleaños, el se levanta sonriente, y no le decimos nada.
—Tengo mucho trabajo hoy, no puedo creer que tenga tantos clientes, a pesar que tengo poco tiempo de haber abierto esta sucursal. — Manifiesto mientras desayunamos.
—Me alegra mucho tu éxito, te lo mereces, además cocinas tan bien como tu madre. — Exclama el suspirando mientras desayuna.
—No puedo negar que extrañaba mucho tu comida. — Respalda mi suegro.
—Gracias. — Respondo con las mejillas rojas, viendo el desastre que hace Oliver mientras come, tendré que cambiarlo de nuevo.
Se está echando comida hasta en el cabello—No hagas eso. — Me quejo.
—Déjalo, lo volvemos a bañar y ya. — Dice Samir para que no me altere, Oliver esta pequeño.
—Bien. — Respondo resignada, tratando de cargarme de paciencia, Oliver es la material