Los días continuaron pasando con relativa normalidad, después del incidente tonto con la caja, nada más ocurrió en casa.

Creo decir que esto fue un gran alivio para mí, porque ahora me sentía muy nerviosa con todas las cosas que estaban ocurriendo con mi embarazo, y temía por mi pequeño pingüinito. Pero por el siguiente mes, hasta llegar a mis exámenes, las cosas fueron bien.

Mi vida finalmente se había convertido en aquel sueño magnifico que siempre había tenido, ahora contaba con un esposo amoroso, es decir Iván, quien me llenaba de atenciones y siempre estaba sobre mí, además de que mi relación toda mi familia se había arreglado, y pronto terminaría la escuela como le había prometido a todos.

Y hoy era el día, a tan solo una semana de cumplir 6 meses de embarazo, comenzaron los exámenes. Mucha gente se preguntará por que no tomé el examen por internet, ya que técnicamente este examen puede tomarse en cualquier momento de forma online. Pero yo preferí tomarlo de forma presencial con