Alicia.
Un delicioso aroma a comida me despierta, abro los ojos y miro que está Andrés cocinando tiene un mandil puesto se ve realmente cómico.
-Qué bonita te miras cocinando.
-Hasta que despiertas pensé que te habías quedado en coma.
-No fastidies tan temprano.
-Te sigue costando levantarte temprano.
-Sí bastante, lo bueno que las tiendas de tatuajes no abren temprano.
-Eso sí.
-¿Y Mónica?
-Se está dando una ducha.
Me levanto y me siento a la mesa, el termina de preparar el desayuno apaga la estufa y cirve todo en los platos, los coloca en la mesa y se sienta, me está mirando muy serio eso es algo muy raro en el.
-Andrés estás bien.
-Alicia debo de confesarte la razón por la que en verdad venimos aquí, Mónica no me lo ha confirmado pero tengo mis sospechas de.
Andrés se detiene y guarda silencio, que tendrá Mónica está enferma o algo peor.
-Que es Andrés dime.
-Tengo la ligera sospecha de que.