Escuchar a Ellen roncando me hace despertar de mi sueño, miro el reloj en mi teléfono y veo la hora, es casi media tarde.
-Disculpe, ¿sabe algo del paciente Edward Brawn?- le pregunto a una enfermera en la recepción mientras dejo a mi amiga dormida en el sillón.
- Su operación está a punto de terminar, sus signos están estables, su doctor no debe tardar en salir para darle información- asiento y vuelvo a mi lugar, estoy demasiado cansada, física y mentalmente.
-¿Todo bien?- pregunta mi amiga adormilada
-Eso creo, el doctor no debe tardar-
-Él estará bien- murmura antes de volver a dormir, lo pienso por un momento antes de tomar mi teléfono y hacer una llamada.
-¿Hola? ¿Katy?- la voz de mi madre responde y tardo algo en responder
- Hola mamá, ¿cómo estás?-
-Yo, muy bien querida, no has tardado nada en llamar, esperaba tener que obligarte a qué lo hicieras en unos días-
- Un amigo está en el hospital y solo...quería escuchar tu voz- le confieso
-Oh mi dulce niña, ¿estás bien? ¿es algo g