―Porque ella tiene artimañas para hacerle creer que está arrepentida… ¡Es una chica muy lista! Incontrolable… pero lista… Además, el director le tiene mucho cariño a Christopher , y a veces él mismo interviene para que estos dos se reconcilien... Es por el futuro de Christopher , ¿comprendes? Ya habíamos hablado… —reconoció Ricardo, cambiando su voz al final, para hacerme entender que no era un buen momento para hablar de ello.
―Entiendo… —dije, y nos quedamos en silencio por un momento.
—Yo lo siento por el director, pero prefiero no heredar ningún cargo si voy a tener que aguantar está clase de arrebatos toda la vida… ¡Ser esposo de Rosa! ¿Se imaginan? ¡Sería una locura! —reaccionó Christopher , dándose cuenta de su temible destino.
―No seas tonto, Christopher . Cuando seas director, te divorcias y listo… —bromeó Ricardo, pero con una buena sugerencia, jajaja.
—¡Jajaja! Es buena idea, pero no sé si pueda soportar la luna de miel… ¡Más bien sería “luna del terror”! ¡Jajaja! —bromeó