Catalina Abrego de Stuart
Ni, siguiera recuerdo como logre salir de ese lugar por mi propia cuenta. Me sentía muy mal e inútil. Mi mente está dominada por el temor. Esa mujer sigue siendo más fuerte que Yo. Sus amenazas contra mis hijos me dejaron en un estado emocional alterado.
-Señora Catalina, está bien ¿Qué sucedió entre usted y esa mujer? No, debí dejarla sola con esa tipa. Tenía que, entrar con usted –Eliza expresa su preocupación y estoy sumamente agradecida.
-Está bien, Eliza solo que me tomo con la guardia abajo. Pensé que iba a superar sus malvadas palabras pero ha sucedido todo lo contrario. Para terminar de esa manera. Me afecto más profundamente porque está determinada a dañar lo que me importa en esta vida. Eliza, puedes ayudarme a vencerla en su terreno. Me ayudas a ser más fuerte, por favor como… tú.
-Señora Catalina. No sé, ¿Cómo ayudarla? Debe hablar con el señor Stuart…
Niego con mi cabeza aunque estoy de acuerdo con ella que mi esposo puede protegernos. Quier