Al día siguiente, lo ocurrido se convirtió en un tema viral.
Todo el mundo criticaba a Fernando.
“Madre mía, es la encarnación del demonio, ¿cómo pudo hacerle eso su propio hijo?”.
“¡Es una bestia de sangre fría, ¡le corresponde estar en el infierno!”.
“¡Santo Cristo! ¡Dejaba embarazada a su esposa solo por salvar la hija de su amante! ¡No se le puede ni considear humano!”.
Le insultaron de todo, y el asunto afectó gravemente a la reputación de los Gutiérrez.
El anciano Gutiérrez no tuvo más que salir a dar cara y decir que rompía los lazos con él y anunció que entregaba a Lucía sus acciones, porque Fernando ya era un inútil y solo le quedaba Lucía.
Desde ese día, Fernando estuvo bajo investigación todo el tiempo y Lucía dirigía la empresa en su ausencia.
Mientras tanto, yo estaba lidiando el divorcio con Fernando.
Le entregué al abogado el vídeo de su infidelidad, y la prueba de paternidad de Ana.
Quería a Fernando salir de este matrimonio sin llevarse nada.
Cuando este se enteró de m