Dos lujosos autos llegaban a la lujosa Mansión Dankworth, de ellos, descendieron Andrómeda y Altair junto al pequeño Jayden, así como Thomas, Jacob y Sophie, Nereida ya los esperaba y los condujo dentro del recinto, una elegante, pero sumamente escandalosa mujer, se abalanzó sobre la cobriza, quien la abrazo de vuelta con una sonrisa.
- Andy, tanto tiempo desde que nos visitaste! No tuve oportunidad de acercarme en tu presentación y fiesta de compromiso, mírate, ¡estás bellísima! - decía la sumamente escandalosa mujer.
- mamá! Deja que Andy respire un poco - dijo Nereida arrebatando a la cobriza de los brazos de su madre.
- oh lo siento Sashi, pero hace tiempo que no veía a Andy que me emocioné - dijo la mujer tocándose tímidamente la mejilla y prestando atención en los acompañantes de la piel nívea.
- mucho gusto, mi nombre