108. Armado hasta los dientes.
Evan.
Actualmente nos encontrábamos cargando provisiones en lo más cercano a una tienda que tenía para ofrecer una pequeña aldea al Norte del continente Africano.
-Pregúntale si está seguro de que han ido en esa dirección, por favor.- Dije a mi intérprete. Él le tenía que transmitir el mensaje a uno de los pobladores de esta aldea alejada del mundo para que pudiéramos tomar prestada la avioneta vieja en un hangar de un tipo a pocos kilómetros de aquí.
Hace un par de días, cuando viajamos a Rusia todo se había salido de control.
Con nuestras chicas a salvo en la nueva manada Garras Luna (A excepción de la cabezota de mi hermana) nos dirigimos de vuelta a Europa para tratar de ayudar a Dalila. Los machos de nuestro pequeño “team Dalila” habíamos notado a nuestras lobas extrañas, pero hicimos un pacto no verbal de averiguar qué mierda les pasaba en cuanto termináramos esta última misión. Porque sería la última; debíamos de terminar con el asunto de David lo más pronto posible.
La operac