-¿Estás dibujándome?
-No-me giré rápidamente y cerré mi cuaderno.
No medí mi nivel de voz, todos me miraban con rareza.
-¿Pasa algo señorita Hale? -preguntó la maestra.
Lucas tenía una sonrisa ladeada y burlona, yo estaba cuestionándome como era su forma de pensar, ¿creía que podía enojarse y luego venir como si nada? Sí, según su cara eso parecía ser lo que creía. La maestra seguía viéndome a la espera de una respuesta. Yo me reacomodé.
-No, nada, es que me acabo de recordar que dejé algo importante en el casillero-mentí.
-Bueno, mientras no sea ningún problema con mi clase, no importa-habló.
-No, no lo es-dije tranquila.
-Muy bien, entonces sigamos-continuó explicando la ecuación en la pizarra.
Al no poder hablar, escribí dos palabras en mi cuaderno para él.
"Te odio"
-Me dibujabas, así que esas palabras no tienen sentido ahora-se puso de cuclillas para mirarme a la cara sonriente-Ni después