Una vez que se fueron pude respirar un poco más tranquila, me siento mucho menos abrumada. Dejo escapar un suspiro mientras intento calmarme. Aker me mira con precaución y no puedo apartar la mirada de él. Actualmente estoy estudiando todo de él. No estoy segura de si realmente planea llevarme a casa o si solo me estaba mintiendo.
Cuando se abre la puerta de la habitación, retrocedo bruscamente y empiezo a respirar con dificultad. El ve mi angustia y se acerca a mí para calmarme. Sin embargo, cuando ve que su acción me hace sentir más incómoda, se queda donde está y me informa que solo es el médico de la manada para asegurarse de que estoy bien.
Niego con la cabeza mientras sostengo mis manos frente a mí como mecanismo de defensa. El hombre se detiene en la puerta y no hace ningún movimiento para acercarse, lo que me ayuda a calmarme un poco.
- Hola. Mi nombre es John y soy médico aquí. ¿Puedo revisar tus heridas? Una vez que te dé el visto bueno, podrás irte