CAPITULO 61

El rey Drácula llegó al castillo en forma etérea, justamente en su despacho y vio a su hermana sentada en su escritorio, pero no estaba sola, ahí estaba Nara su empleada incondicional. Estaban conversando, al oír el nombre de Erick lo puso alerta y prefirió escuchar primero.

—Nara quería decirte algo, pero, ¿cuento con tu lealtad y silencio?

—Claro que sí, majestad

Laila comenzó a hablar mientras se agarraba la cabeza con sus manos

—Descubrí que... ¡Ay, no! ¡creo que no hay justicia en esta vida. Yo que tanto ansiaba conocer a mi alma gemela, a mi amor verdadero, a mi compañero eterno (lanzo un resoplido largo para soltar) Y que me madre luna me manda a quien yo menos me esperaba.

Nara la observaba curiosa y ansiosa por enterarse, que se olvidó del respeto que debe tener para la princesa y casi grito.

—¡No me tenga en ascuas! ¿quién es?

Laila se quedó mirándola con incredulidad al escucharla alzarle la voz y Nara se dio cuenta para después pedir disculpas. Como Laila estaba más por re
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App