Luis llegó acompañado de Isabella. Ella, siguiéndolo apresuradamente con su cabello algo desordenado, tomó el brazo de Luis y le hizo una señal negativa con la cabeza.
—¡Señor Valdez, no vaya! ¡Por favor, no lo haga! —imploró Isabella mirando a Luis—. El señor Mendoza no lo invitó a esta conferencia