Pero Marcela sintió miedo. Rápidamente tomó a María y le quitó el teléfono: —¡Somos familia! ¿Por qué llamarías a la policía? ¿Qué dijo el médico? ¿De verdad está tan mal?
—¡Está inservible! —María, notando el temor de Marcela, alzó su voz con insistencia.
—¡Solo tenemos a Antonio en nuestra familia