Capítulo 16.

Discusión animada.

Valentina busca para él una naranja y la pela rápidamente, llevándole un trozo a la boca.

—Ábrala boca… —Le pone la naranja—. Mastique, hasta le quite la semilla, vamos, coma mientras le preparo la comida.

—Gracias.

—¿Su abuelo sabe de esto?

—No, no es necesario preocuparlo por estas cosas.

—Entonces me toca la peor parte a mí, ya que debo cuidarlo como a un niño. Qué irónico.

Ricardo se queda en silencio; la ve moverse con su sensual pijama de shock por la cocina, ella preparando rápidamente una tortilla de huevo con queso cheddar, papas y jugo de naranja. No le toma muchos minutos; coloca todo en la bandeja y se la lleva al sofá.

—Gracias por la comida.

—No hay de qué, ahora me explica qué enfermedad tiene, y no me mienta porque lo vi ponerse como hoja blanca.

Él sonríe con esa ligereza que lo caracteriza.

No es nada grave, el doctor dijo que de no comer a la hora o saltarme comidas, me puede provocar una serie de sensaciones y