Matthew.
Ese bastardo está demasiado pegado a Catherine. No la suelta incluso en mi presencia. La sujeta de la cintura con más precisión mientras me ve muy orgulloso.
Zack, no eres más que un simple bastardo, ¿cómo te atreves a mirarme de esa forma? Y ¿Cómo te atreves a tocarla?
- No tengo asuntos que tratar con usted y si fuera así tendría que agendar una cita.
- Es un asunto personal- respondí.
- No hay asuntos personales entre usted y yo.
La sonrisa de burla que tiene Zack en estos momentos, me dan ganas de borrarla con un solo golpe.
- ¿De qué te ríes? - Cuestioné.
Catherine miró a Zack, no se había dado cuenta de la expresión que tenía es este momento.
- De ti- respondió sin pena alguna.
Olvidé que Zack es ese tipo de persona que siempre me saca de mis casillas.
- Ustedes son, salgas de mi oficina ahora mismo- ordenó Catherine.
- ¿Eh? ¿Por qué yo? - pregunta Zack.
Es inútil que actúe de esa manera ante ella.
- Tú espérame afuera, terminaré mis pendientes pronto, luego