- ¡ALINA! – gritó asustado Guillermo corriendo y logrando atrapar a Daniel antes que cayera al suelo, aunque por el susto y el dolor de sus brazos empezo a llorar a todo pulmón.
- DANI – la castaña grito asustada al ver que paso, moviendo el carrito de super para ayudar a su esposo, quien detuvo el objeto con su cuerpo.
El grito de ambos llamo la atención de los demás clientes y vendedores, donde los últimos fueron a ayudar ya que el pequeño rubio estaba llorando a todo pulmón por el dolor en que le jalaron la mochila y el susto por el ruido del carrito al caer en el suelo.
- Señores ¿están bien que paso? – dijo un trabajador ayudando a la pequeña pelinegra a recoger las cosas.
- La niña rubia de vestido rojo, deténganla – ordenó Guillermo para confusión de los trabajadores, pero alguien entendió sus palabras.
- ¿Señor, de que habla?
- ¡NOOO! ¡suéltenme! – en eso vieron que un pelirrojo sujetaba a la pequeña rubia y la llevaba hasta donde ellos estaban.
- ¿QUE LE HACE A NUESTRA HIJA?